sábado, 29 de octubre de 2011

Anticoagulación, sintrom y davigatrán

Cada vez es más frecuente el uso de medicación anticoagulante en paciente con alto riesgo de presentar  émbolos o trombosis que son obstrucciones en  un vaso sanguíneo. Si la circulación se interrumpe en una zona del cerebro o del corazón podrán imaginar que las consecuencias son peligrosas.

Estos medicamentos han de tomarse con mucho cuidado. Con el Sintrom pasa como en las siete y media hay problemas si nos quedamos cortos (no funcionan) o si nos pasamos (puede haber hemorragias). Por esta razón es necesario hacer controles periódicos en el centro de salud, habitualmente uno al mes.

Recientemente se ha presentado otro fármaco más moderno Davigatrán,  para el que no es necesario hacer controles.

El laboratorio lo propociona con toda clase de parabienes. Como con toda novedad habrá que tener cuidado con los riesgos. El principal parece ser la hemorragia grave en pacientes ancianos.






Sandra Bermudez nos hace unas recomendaciones dietéticas para las personas anticoaguladas con sintrom:


El tratamiento con Acenocumarol (SINTROM) o Warfarina, debido a su acción antivitamina K, se ve influenciado por la riqueza en vitamina K de los alimentos que se ingieren en una dieta y que, en ocasiones, pueden modificar el efecto que se pretende. Por ello, conocer el contenido en vitamina K de los alimentos y advertirlo a estos pacientes, debe de formar parte de nuestro protocolo de actuación y educación para este tipo de pacientes, si queremos obtener el máximo beneficio del tratamiento anticoagulante.
Es muy importante, en primer lugar, advertir al paciente que no debe modificar en exceso su dieta diaria, sino que debe comer de una forma sana y variada. No hay ningún alimento que esté totalmente prohibido, lo que se ha de comentar es que no debe estar comiendo, por ejemplo, exclusivamente verduras durante una semana entera, o sólo carne; la dieta ha de ser equilibrada y variada.
En el caso en que el paciente haya decidido comenzar una dieta, sobre todo para perder peso; o haya habido algún cambio brusco en la alimentación, se recomienda que se le comunique al Servicio de Hematología donde realiza sus controles periódicos; puesto que esto puede variar el frágil equilibrio que existe entre la dosis de vitamina K y el anticoagulante oral (que recordemos que actúa como antivitamina K).

A continuación, enumeraré los alimentos ricos en vitamina K, realizando una estratificación de los mismos:
  • VERDURAS FRESCAS:
  •  Contenido bajo (< 50 microgramos): judía verde, guisantes, coliflor, apio, maíz, berenjena, champiñón, cebolla, pimiento verde, calabaza, tomate, pepinos.
  • Contenido medio (50-150 microgr.): zanahoria, patata, espárragos, aguacates, lechuga verde, repollo.
  • Conteindo alto (>150 microgr.): brócoli, col de Bruselas, endivias, espinacas, lechuga roja, perejil, nabos, berros, acelgas, repollo, mostaza en grano, castañas.
  • FRUTAS FRESCAS:
  • Contenido bajo: manzana, plátano, arándano, melón, uva, pomelo, limón, naranja, fresas.
  • CARNES Y PESCADOS:
  • Contenido bajo: buey, pollo, jamón, cerdo, pavo, ternera, atún, merluza, gambas, caballa.
  • GRASAS Y ACEITES:
  • Contenido bajo: aceite de maíz, cacahuete, sésamo, azafrán, girasol.
  • Contenido medio: margarina, aceite de oliva.
  • Contenido alto: mayonesa, aceite de soja.
  • OVO-LÁCTEOS:
  • Contenido bajo: mantequilla, leche, queso, yogourt, huevos, cuajada.
  • BEBIDAS:
  • Contenido bajo: café, colas, zumo de frutas, té negro, agua mineral.
  • Contenido alto: té verde.
  • PASTAS Y CEREALES:
  • Contenido bajo: arroz, spaghettis, pan, cereales, rosquillas, avena.
  • OTRAS:
  • Contenido bajo: miel, gelatinas, azúcar.
En cuanto a la ingesta de alcohol, se le debe explicar al paciente, que podrá tomar un vaso de vino o una cerveza, siempre de forma moderada, con las comidas. Bebidas de mayor graduación, potencian el efecto anticoagulante, descontrolando y haciendo imposible el buen control del tratamiento.
Hemos de advertirles también sobre el tabaco, que es muy rico en vitamina K, por lo tanto, puede frenar el efecto del anticoagulante.
Por otra parte, se desaconsejan totalmente los preparados de herboristería o suplementos vitamínicos, puesto que algunos de ellos también interfieren de forma importante.
Si el paciente tiene nauseas y vómitos, tras la toma de la medicación, es necesario que repita la toma, puesto que estos fármacos se absorben por el aparato digestivo.

Leer post completo en el blog de Sandra Bermudez. 

Vídeo de Tamara Sancho

1 comentario:

Ana di Zacco dijo...

Felicidades de nuevo y gracias por compartir. Sólo hay una cosa que no entiendo: "se desaconsejan totalmente los preparados de herboristería". Si se admite (porque químicamente hay que admitirlo, faltaría más) que ciertos vegetales son anticoagulantes, ¿por qué no admitir también que ciertas plantas tienen efecto contrario y podrían utilizarse igualmente?