viernes, 29 de abril de 2011

How can GPs of several countries think together to improve NHS? #1care

Un servidor lanza una pregunta:

Salvador Casado How can GPs of several countries think together to improve NHS?  #1care
 
 
 
 Responden cuatro médicos de prestigio:
 
 
agree-erode sectarianism in healthcare and help pathway thinking
 
AnneMarie Cunningham  more importantly twitter bridges sectors
 
Emma Stanton =innovative forum of connections to bring GPs together
 
  more EBM, implementation and imp research needed


Esto era imposible hace unos años. Hoy las ideas y el sentido común pueden comunicarse y compartirse. No hay fronteras para el talento... y en la red hay gente reamente buena.

jueves, 28 de abril de 2011

#médicostuiteros







Cristina de Martos, periodista del periódico el Mundo, ofreció hace unos días un artículo sobre médicos tuiteros con la participación de @juliomayol @drcasado @vbaosv @melmack2k y @doctorcasado (un servidor). No sabemos qué impacto o utilidad pueda tener que los médicos participen en redes sociales virtuales. Pero aventuro que todo lo que haga salir a un profesional sanitario de su consulta y acercarse a la sociedad es positivo. Los médicos han de implicarse más en las comunidades en las que viven, participar, comunicar, compartir, ser agentes de salud, no únicamente profesionales de la salud.

Las redes sociales son un paso necesario para los profesionales de la salud, permiten escribir y generar contenidos que se pueden compartir. Creo que es bueno tener presencia ahí. Como también lo es caminar las ciudades, barrios y pueblos, conocer la red formal e informal de cuidados de salud, los grupos de pacientes, las asociaciones de vecinos, los ayuntamientos, los servicios sociales... es lo que llamamos medicina (salud) comunitaria, término que no es políticamente muy popular en estos momentos.
Los médicos de familia cada vez pasamos más tiempo en la consulta, estamos cada vez más sobrecargados. La asignatura comunitaria queda sin atender.

El reto de futuro es generar redes comunitarias de salud como la que el Proyecto Fresneda lleva a cabo.

¿Seremos capaces?