viernes, 13 de septiembre de 2019

Una residente en consulta






Durante el mes de septiembre tengo el privilegio de recibir la visita de una residente de tercer año en rotación rural. Una profesional joven con gran motivación y un excelente fondo de la que estoy seguro llegará a ser una médica de referencia para muchos. En teoría viene a aprender de qué va esto de la medicina rural pero en la práctica no es más que una excusa para flexibilizar los oxidados tornillos de este médico de pueblo que escribe reflexiones para ustedes desde el cuaderno público que es un blog. 

En la primera semana nos hemos enfrentado a situaciones de alta complejidad clínica, psicológica, social y espiritual. Dos pacientes en situación de cuidados paliativos han fallecido, uno tras una agonía corta de 72 horas, otro tras varios meses. Reconozco que he llegado a casa hecho fosfatina varios días y que ha habido casos que han exigido una gran dosis de energía por nuestra parte. 

La formación de un profesional sanitario no acaba nunca. Me doy cuenta cuando unos ojos son testigos de mis limitaciones y de alguna manera, casi siempre no verbal, me lo hacen evidente. Técnicamente tengo muchos defectos, no sigo gran cantidad de protocolos ni indicadores de cartera de servicios, intento priorizar mirar a la cara del paciente más que al ordenador y no doy la talla con frecuencia a la hora de satisfacer las expectativas de los que me consultan. Pese a todo me siento privilegiado por ejercer la profesión que he elegido de una manera bastante libre y con unos resultados aparentemente aceptables. 

Tengo tres semanas de rotación supervisada por delante en las que espero seguir aprendiendo. Como soy zorro viejo en la profesión sé de buena tinta que hay mucho que aprender de los que me rodean sean administrativas, auxiliares, enfermeras, trabajadoras sociales, estudiantes y demás profesionales amen de los pacientes. Recuerdo hoy en especial a Angelita, la responsable de limpieza del centro de salud Villalba pueblo de la que tanto aprendí, entre otras cosas a mantener la sonrisa y el buen ánimo caiga quien caiga. 

Cuenten con que compartiré desde esta tribuna lo aprendido.







(Si eres residente y estuvieras interesado en una rotación rural en mi consulta no dudes en contactar conmigo, en un mes garantizo buenas oportunidades de aprendizaje.)

martes, 10 de septiembre de 2019

Más dura será la caída. The harder the fall. 跌倒越難。






Cuando alguien llega a lo más alto nunca imagina lo pronto que comenzará a descender. Si lo hace en un país con honda tradición de ingratitud y envidia como el nuestro más dura será la caída. De nada servirá haber conseguido esa marca deportiva, medalla, premio, invención o gesta, al poco surgirán multitudes que gritarán impostura. 

Por eso cuando leo ciertos orbituarios en los medios de comunicación no puedo sino compadecerme de lo mucho que habrá sufrido el finado. Historias de desencuentro, reinvención fallida, soledad, incomprensión… en muchos casos enfermedad o adicciones y una larga lista de penurias. 

Tenemos pues la paradoja de una sociedad que en apariencia ensalza a sus héroes por un día y por otro los deja estrellarse en el olvido la semana siguiente. Una juventud engañada a la que se pone de zanahoria una pléyade de ídolos efímeros que son permanentemente sustituidos para mantener la cota de atención mediática. 

La perversión mediática de la sociedad del espectáculo produce sufrimiento tanto en aquellas mayorías que no llegarán nunca a acercarse a la cumbre como en las minorías que lo consiguen y luego se estrellan. 

Si lo pensamos bien todo se suele reducir a una cuestión de valores. Seguramente nos vendría bien preguntarnos qué valoramos más y si vivimos en coherencia con ello. De los ángeles caídos aprendo lo importante que es volver continuamente a esta pregunta y recordar que más importante que triunfar ante el mundo quizá lo sea hacerlo para uno mismo. 


The harder the fall. 



When someone reaches the top he never imagines how soon he will begin to descend. If you do it in a country with a deep tradition of ingratitude and envy as Spain we can say: hardest will be the fall. It will be of no use to have achieved that sports brand, medal, prize, invention or deed, soon crowds will arise that will shout: crucify him. 

That is why when I read certain obituarys in the media I can only feel sorry for how much the deceased has suffered. Stories of misunderstanding, failed reinvention, loneliness, incomprehension... in many cases illness or addictions and a long list of hardships. 

So we have the paradox of a society that apparently praises its heroes for one day and then lets them crash into oblivion the following week. A deceived youth following a pleiade of ephemeral idols that are permanently substituted to maintain the level of media attention. 

The media perversion of the society of the spectacle produces suffering in those majorities that will never get closer to the summit and in the minorities that achieve it and then crash. 

If we think about it well, everything is usually reduced to a question of values. Surely it would be good for us to ask ourselves what we value most and whether we live in coherence with it. From the fallen angels I learn how important it is to continually return to this question and remember that more important than triumphing over the world is perhaps to do it for oneself. 





   跌倒越難

當有人到達頂峰時,他從未想像他會多久開始下降。如果你在一個有著忘恩負義和嫉妒的傳統的國家這樣做,我們可以說:最難的是墮落。獲得體育品牌,獎牌,獎品,發明或契約是沒有用的,很快就會出現會喊叫的人群:將他釘在十字架上

這就是為什麼當我在媒體上閱讀某些時,我只能為死者遭受多少苦難感到遺憾。誤解的故事,失敗的重塑,孤獨,不理解......在許多情況下疾病或成癮和一長串的艱辛

因此,我們有一個社會的矛盾,顯然有一天讚美其英雄,然後讓他們在接下來的一周崩潰。一個被欺騙的青年追隨一個短暫的偶像,永久取代,以保持媒體關注的水平

媒體對景觀社會的歪曲在那些永遠不會接近峰會的少數民族和實現它然後崩潰的少數民族中產生痛苦

如果我們考慮得好,一切都會被簡化為價值問題。當然,對我們來說,問問自己最重要的是什麼以及我們是否與之保持一致對我們有好處。從墮落的天使中我了解到不斷回到這個問題是多麼重要,並且記住,勝過世界更重要的可能就是為自己做這件事


自動翻譯,對不起錯誤。







lunes, 9 de septiembre de 2019

La medicina de familia del presente. Una de las mejores visiones que conozco.




Para llegar a ser médico hace falta una sólida formación, abundante conocimiento y sobre todo buenos referentes. He de reconocer que he sido afortunado por conocer excelentes profesionales y personas dentro y fuera del mundo sanitario que me han enseñado, acompañado e inspirado. 

Consideró positivo reconocer el mérito de aquellos que nos han facilitado la vida con su ingenio permitiendo cosas como la cirugía ocular o los antibióticos. Pero también merece la pena detenerse a valorar la contribución de los que cerca nuestro facilitan el avance de las cosas y nos las hacen más sencillas. 

Hoy me gustaría agradecer de nuevo a Mercedes Pérez-Fernández y a Juan Gérvas por su constancia, lucidez y tenacidad. Nos han regalado incontables artículos científicos y reflexivos, clases, presentaciones, libros… Nos han regalado el tesoro de los Seminarios de Innovación, un modelo de jornada científica multidisciplinar sin parangón en el mundo. Y nos acaban de regalar un texto que sin duda se convertirá en seminal para muchas generaciones de profesionales sanitarios. Un escrito que contiene una lección a residentes en Quito en agosto de este año y cuya lectura recomiendo fervientemente a todos los lectores de este blog.

Si yo fuera estudiante de medicina agradecería toparme con él, si fuera médico residente mucho más y he de decir que siendo médico senior me ha reconfortado y convencido de lo mucho que me queda por aprender y de la fortuna de poder desempeñar una de las labores más increíbles que existen: ayudar a otros. Esa función me hermana a otras muchas personas que desde su profesión o fuera de ella lo hacen cada día. 

La visión de Mercedes y Juan nace de una dilatada experiencia en las ciencias de la salud y en la vida. De una talla de humanidad mucho mayor que la que se consigue con la mera erudición. Además del respeto que les debo por ser mentores añado el agradecimiento por sentirlos amigos. Desde este humilde portal les mando un sentido abrazo.


El acceso al texto es gratuito desde el blog de los autores.

lunes, 12 de agosto de 2019

Mediterráneo africano




Por mi consulta de Miraflores de la Sierra pasan todas las semanas varios chavales africanos recién llegados. Consultan sus cuestiones de salud y luego siguen camino a Francia u otros lugares. De alguna forma comparten conmigo sus viajes, penas y anhelos que descubro en sus miradas, silencios y sonrisas. 

Los medios de comunicación nos saturan con noticias de pateras y barcos llenos de inmigrantes que nadie parece querer acoger, lo que provoca la indignación de unos y las protestas de otros en una interesada argucia para dividir a la gente. El problema de fondo no es si dejar pasar o no a los que se echan a la mar sino la situación de enorme injusticia y violencia que obliga a muchos a huir lejos para buscar un mundo mejor. 

Doy la palabra hoy a Juanjo Aguirre, misionero en República Centroafricana desde hace décadas. Tengo la suerte de conocerle personalmente y de seguir sus desvelos que comparte por carta de vez en cuando. Lo que él dice no lo verán en televisión ni lo encontrarán fácilmente en los medios. Es el testimonio de un valiente que representa a otros tantos que llevan mucho tiempo apuntalando un mundo que parece caerse a pedazos. 

Léanlo y mediten luego en sus problemas cotidianos para tratar de ponerlos en perspectiva. Léanlo y den luego gracias por que tengamos agua potable en el grifo y la posibilidad de salir a la calle sin que le vuelen a uno la cabeza. Léanlo y descubran que el mundo es mucho más grande de lo que habitualmente pensamos. 







Centroáfrica, pan y paz



Oigo en la radio que el número de pobres en el mundo ha aumentado a 820 millones, más de 250 sólo en el continente africano. En Bangassou están llegando niños con el pelo seco como la estopa, las mejillas caídas y un poco de encefalopatía. Eso es que está gravemente desnutrido. Enfermedad de Kwashiorkor. Huyen de la guerra. Centroáfrica está en el vagón de cola de la pobreza y niños como éste llegan cada día a la maternidad a por leche Hero que nos mandan desde Córdoba. Alguien de la Fao, con un cochazo impresionante y un salario no menos alucinante, vino a Bangassou en febrero a decirnos que las cosas irían a peor. Para nosotros es como hacer un agujero en el agua! Más guerra e inseguridad, más hambre. Creo que la pobreza, el islam radical y el calentamiento global son los mayores problemas que tiene nuestro planeta hoy, son la espada de Damocles sobre nuestras cabezas en un próximo futuro. Hemos distribuido garbanzos y pasta de León, máquinas de coser, medicinas y materiales varios que non llegaron hace un año en un contenedor. Todo se quedó bloqueado en Bangui a causa de la guerra. Lo hemos traído con camiones, poco a poco, pagando barreras y soportando robos y raterías. Para los desnutridos un potaje de garbanzos del Bierzo y arroz Largo con champiñones sabe a gloria.
Mientras, Centroáfrica se llena de extranjeros atroces que llevan y trafican con armas, que matan antes de preguntar (mercenarios), o de extranjeros que extraen minerales y contaminan los ríos (empresas multinacionales chinas, rusas, etc.), y otros que trabajan en ongs humanitarias o en organismos de la ONU (son miles, con miles de Toyotas Prado recorriendo toda la geografía del país). Sin embargo la gente sencilla sigue nadando contracorriente, luchando contra la pobreza en estado puro, pagando los platos rotos que ellos no han destrozado. Todos nuestros problemas los empezaron un grupo de fanáticos musulmanes llamados los Seleka que nos destrozaron la vida hace 4 años, cayendo desde arriba como desde un paracaídas, la mayoría extranjeros que pusieron el país patas arriba.

 Los sacerdotes de la diócesis de Bangassou y la mitad de las monjas seguimos aquí, al pie del cañón. Algunos enfrente del seminario ocupado por 1500 musulmanes moderados, que nos lo están destrozando. Sabíamos que iba a ser así y qué precio habríamos de pagar por acogerlos con amor en aquellos horribles días en donde la muerte rondaba sus cabezas. Otros sacerdotes, de dos en dos, en el este de la diócesis (Zemio, Mboki y Obo), viven en zona de alto riesgo rodeados de mercenarios sin escrúpulos, cortadores de cabezas, que solo buscan sacar dinero abusando de la población inerte. Su sed de riqueza es inagotable. En lo que va de año, 47 personas han sido asesinadas en Obo o en sus alrededores y en Bangui se hacen oídos sordos. La semana pasada en Zemio un comerciante se negó a dar a una patrulla de Nigerianos (del Níger) una suma alrededor de 350 euros, lo molieron a palos a sabiendas que los soldados de la Minusca (Naciones Unidas) estaban un poco más arriba. Su cuerpo lo encontraron al día siguiente con 6 balas en el cuerpo, como 6 fogonazos de impunidad en un país donde se gastan decenas de miles de euros en salarios de profesionales de la Onu que dicen estar luchando contra los abusos de los derechos humanos. La mayoría cobra sin hacer ni el huevo. Toda la población de Mboki vive en una cárcel a cielo abierto sin que a nadie le preocupe lo más mínimo. Mientras, los misioneros, los curas y las monjas luchamos para que la gente no se desespere en las comunidades, rezamos juntos, tenemos abiertas las escuelas, pintamos de azul lo que parece negro, esperamos en un futuro sin señores de la guerra, sin mercenarios asesinos, sin miedos a la hora de ir a las plantaciones, con escuelas abiertas y mercado libre. Doble ración de esperanza a la cruda realidad.
En Bangui, la capital, miles de profesionales de ongs y militares ONU dicen que todo va mejor después de que el gobierno firmó acuerdos de paz el mes de febrero 2019 con 14 señores de la guerra en Jartum (Sudán). Los soldados de la ONU han tenido sus aciertos en seguridad pero han naufragado en materia social, aunque estén ya distribuidos por todo el país, porque viven como tortugas dentro de su propio caparazón. La gente les tiene mucha antipatía. De los “humanitarios”, casi ninguno sabe lo que pasa en

 el este del país (sus coches tienen prohibido pasar del km 12), son pocos los que se han pateado un campo de refugiados, lonas grises con olor de letrina y hambre atrasada, los que han tocado en mano el sufrimiento de 600.000 desplazados fuera de sus hogares, el llanto de los niños o de la brutalidad de los que deberían protegerlos. En Bangui hay un hotel de 5 estrellas, construido por Gadafi cuando esperaba vivir muchos años más y que Centroáfrica construyera una inmensa mezquita en el centro de la ciudad. El hotel surgió pero la mezquita naufragó. Ahora este hotel es el hogar casi permanente de cientos de humanitarios (de directores adjuntos para arriba), que llenan su piscina a partir del mediodía, que van de vacaciones cada dos meses (en sus contratos pone que para “destresar”) y reciben salarios inimaginables en Centroáfrica, más primas de riesgo, de lejanía, de “per diem”, de aire acondicionado o de 20 gaitas más... El foso que existe entre ellos y la gente del pueblo es abrumador. El gobierno casi no existe y todo el poder está en manos de la Onu, de países como Rusia, la China, EEUU, la unión africana, el real consulado de Lituania o qué se yo!
Cientos de ongs ganan suculentos mercados provenientes de países donadores (Suecia, Noruega, Canadá o Australia entre otros), pero la ayuda llega a la gente de forma fragmentada y desigual, y fuertemente disminuida por la propia logística interna. Casi ninguna Ong que ha ganado el mercado distribuye nada. Subcontrata a otras ongs más pequeñas para el trabajo tierra tierra y lo hacen por dinero, con total falta de empatía por la gente. Miro a los niños del orfanato de Bangassou, al bebé de dos meses que nos acaban de traer y me pregunto cómo están ellos viviendo esta guerra, que en Bangui dicen que ya no lo es. Esas criaturas quieren comer cada día y lo seguiremos haciendo aunque en Bangui hayan aceptado la imposición de meter con sacacorchos a 4 de los señores de la guerra, criminales todos, no centroafricanos, para hacer parte del gobierno actual y cobrar por ello. Creo que es el único país en el mundo donde 4 extranjeros forman parte del gobierno. Los niños de los 4 campos de desplazados que hay en Bangassou, los ancianos de la casa de la Esperanza, que ahora están “entre algodones” con una cooperante cordobesa que los cuida desde hace dos meses, o las madres sin

 trabajo que vienen a la costura con sus niños colgando del pecho, ya no quieren saber si el ministro es chadiano o de la región vecina. Ellos quieren pan y paz. Y esto, ni los soldados de la Onu, ni las ongs ni los organismos internacionales llegan a dárselo, o les llega gota a gota. Cómo saldremos de ésta? Porque salir, saldremos!. Los extranjeros solo miran y se enriquecen. Muchos saben que hay que prolongar este “status quo” porqué sin hacer casi nada, les trae más pasta gansa a sus bolsillos. A algunos no les interesa que termine este conflicto. Un batallón de pakistaníes llegados hace un año para arreglar carreteras con todas las máquinas necesarias a su servicio, se acaba de volver a su casa sin haber hecho casi nada, por miedo a salir del campamento. Salarios y primas, pasta gansa y faroles a la mar... es impresentable!
Hace una semana sacaron un niño Peulh de 3 años de un pozo. Muerto! Los Peulh son itinerantes sectarios musulmanes, perseguidos por todos. Será difícil que, armados hasta los dientes como se mueven, sigan pasando fronteras en su continua rueda la rueda de la itinerancia. Unos pocos han encontrado refugio en el seminario de Bangassou, santuario de la colonia de musulmanes de Bangassou desde hace más de dos años. Considerados parias por los otros musulmanes, no rezan juntos, no comen juntos, están al margen. Aunque tienen una cultura propia y están enormemente acostumbrados a tribulaciones, matanzas y a defenderse para sobrevivir, su existencia es cada vez más precaria en Centroáfrica. En el este de la diócesis de Bangassou, a donde se están desplazando con la ayuda de señores de la guerra del Malí y el Níger, pueden ser ya de 10 a 15.000 personas, sobre todo mujeres y niños, en una población regional de unas 30.000 personas. Los hay que hablan el sango, lengua nacional de Centroáfrica, los hay que vienen del extranjero, del Níger, del Sudan o del Chad. De la etnia Fullani que tanto revuelo causa al norte del Sahel.
El niño Peulh desaparecido unos días antes, ha aparecido en un pozo, no lejos del seminario, decapitado e emasculado. Alguien quería demostrar que el seminario no es un lugar seguro y se ensañaron con el niño, lo trituraron con saña y lo convirtieron en chivo expiatorio. Los padres no dijeron nada, ni respiraron por no molestar y la memoria de este crío de 3 años pasó sin pena ni

 gloria por este mundo apenas destetado por su madre, como hacen ellos. Las cosas van mal, pero no se puede decir para que la ONU no se moleste. Eso, pintar de azul, lo que es más negro que el carbón.


Mons Juan José Aguirre, Bangassou 15 julio 2019

jueves, 8 de agosto de 2019

Medicina espiritual Spiritual medicine 精神醫學



 "La crisis que estamos atravesando, el colapso del mundo natural que hemos creado, así como de la cultura en la que hemos vivido el último siglo no es otra cosa que una crisis espiritual. Somos la única civilización de la historia que no gira en torno a algo sagrado. No tenemos religión, en el sentido amplio del término ni noción de algo superior a nosotros. No hay nada ante lo que arrodillarnos, nada que nos inspire humildad. Ni dioses ni diosas ni naturaleza divina. No reconocemos esos términos. Pensamos que están anticuados y vacíos. Evolucionar más allá de la religión es parte de nuestro mito del progreso. Vemos lo sagrado como algo primitivo. Yo no creo que sea así y me ha costado mucho darme cuenta de que no creer en algo superior nos ha convertido en destructores. Nos hemos puesto en el centro del mundo. Nos hemos convertido en un cáncer para el planeta. Y mi conclusión para todo esto, o quizá no sé si llamarla conclusión, sino más bien un paso más en el camino, es la siguiente: si queremos que nuestra cultura —o como la queramos llamar— tenga futuro, vamos a tener que darle a la naturaleza el estatus de sagrada. Tendremos que dar un paso atrás o adelante hacia la búsqueda de una sociedad animista con dioses para todas las cosas: dioses del mar, de las piedras, del viento, etc. Si no somos capaces reconocer que formamos parte de una red vital y solo vemos las cosas como recursos, estamos perdidos.
Somos animales, somos idénticos a las personas que pintaron las pinturas rupestres hace 30.000 años. A nivel biológico, apenas hemos cambiado. Seguimos siendo criaturas salvajes, que no han sido domesticadas. No ponemos por encima la capa de la civilización, pero eso se puede rasgar muy fácilmente".




La medicina actual es una disciplina científica altamente técnica. Eso ha dejado de lado su dimensión histórica espiritual y ha hecho que su versión humanista se resienta. Los profesionales de la salud han devenido en técnicos y científicos al igual que el ejercicio de la medicina y demás disciplinas del ramo. 
Tras muchos siglos de historia ahora podemos decir que la medicina moderna es no espiritual, con todas las ventajas que esto pueda tener. La pregunta que me hago es si habremos perdido algo importante en el camino. 

Al acompañar procesos de enfermedad crónica, grave o estados finales de la vida me encuentro con la frustración de los pacientes ante un sistema sanitario que es incapaz de salvarles. ¿Esto era todo? ¿no se puede hacer más? 

No resulta sencillo explicar que la decrepitud y la muerte son parte intrínseca de la vida y que la medicina en las etapas finales puede paliar síntomas pero no aportar serenidad ni esperanza por si misma. 

Cuando las familias han perdido su herencia de creencias, esperanzas o aspiraciones espirituales y para muchos es implanteable hablar con un clérigo poco puede aportar el profesional sanitario salvo el reconocimiento de la importancia de vivir cada día con la máxima dignidad posible. Lo más valioso en muchos casos es la mera presencia, visitar en su domicilio al paciente y su familia, hacerle ver que sigue siendo cuidado y tenido en cuenta. Aportar silencio o conversación según el paciente necesite. Y descansar en la intención de que el sufrimiento de este sea el mínimo posible. 

Este planteamiento es muy difícil para profesionales entrenados para la acción que toleran mal la impotencia y el no-hacer. Lo habitual es ofrecer conductas de retirada bajo el pensamiento "no es asunto mio" o "esto excede mi competencia". El contexto de sobrecarga permanente que ofrecen las instituciones sanitarias hace habitualmente el resto y la familia se encuentra en muchas ocasiones sola y desbordada. El futuro cercano no parece halagüeño con el envejecimiento poblacional que se avecina, familias cada vez más pequeñas o ausentes y paradigmas predominantes de creencias laicas con poca dimensión espiritual. 

¿Es necesario rescatar la dimensión espiritual de la asistencia y cuidados sanitarios? La controversia está servida. Parece que avanzamos hacia una medicina hipertecnológica de cuento de hadas, como dice Juan Gérvas, capaz de todo tipo de proezas. Quizá estemos construyendo un gigante con pies de barro. ¿De qué le sirve al hombre ganar el mundo si pierde el alma? ¿de qué nos sirven todos los adelantos si al final no encontramos serenidad, sentido o esperanza ante la enfermedad terminal, la decrepitud y la muerte?





Spiritual Medicine

 "The crisis that we are going through, the collapse of the natural world that we have created, as well as the culture in which we have lived in the last century is nothing but a spiritual crisis. We are the only civilization in history that does not revolve around something sacred. We have no religion, in the broad sense of the term, no notion of anything superior to us. There is nothing to kneel before, nothing to inspire humility. Neither gods nor goddesses nor divine nature. We do not recognize those terms. We think they are old-fashioned and empty. Evolving beyond religion is part of our myth of progress. We see the sacred as primitive. I don't think so, and it's been hard for me to realize that not believing in something higher has made us destroyers. We have placed ourselves at the center of the world. We have become a cancer for the planet. And my conclusion for all this, or perhaps I don't know whether to call it a conclusion, but rather a step along the way, is this: if we want our culture - or whatever we want to call it - to have a future, we are going to have to give nature the status of sacred. We will have to take a step back or forward towards the search for an animistic society with gods for all things: gods of the sea, of stones, of the wind, etc. We will have to take a step back or forward towards the search for an animistic society with gods for all things: gods of the sea, of stones, of the wind, etc. If we are not able to recognize that we are part of a vital network and only see things as resources, we are lost.

We are animals, we are identical to the people who painted the cave paintings 30,000 years ago. On a biological level, we have hardly changed. We are still wild creatures, which have not been domesticated. We don't put over the layer of civilization, but that can be torn very easily".

Paul Kingsnorth



Modern medicine is a highly technical scientific discipline. That has set aside its historical spiritual dimension and made its humanist version suffer. Health professionals have become technicians and scientists as well as practicing medicine and other disciplines in the field. 

After many centuries of history we can now say that modern medicine is non-spiritual, with all the advantages that this may have. The question I ask myself is whether we will have lost something important along the way. 


When accompanying processes of chronic illness, serious illness or the final stages of life, I find myself with the frustration of patients before a health system that is incapable of saving them. Was that all? Could we not do more? 


It is not easy to explain that decrepitude and death are an intrinsic part of life and that medicine in the final stages can alleviate symptoms but not bring serenity or hope on its own. 


When families have lost their inheritance of beliefs, hopes or spiritual aspirations and for many it is implantable to speak with a priest, little can be done by the health professional except the recognition of the importance of living each day with the maximum possible dignity. The most valuable thing in many cases is just to be  presence, to visit the patient and his family at home, to make them see that they are still being cared for and taken into account. Provide silence or conversation as the patient needs. And to rest in the desire of  the minimum possible suffering for them. 


This approach is very difficult for professionals trained for action that badly tolerate impotence and nondoing. It is customary to offer retreat behaviors under the thought "it's none of my business" or "it exceeds my competence". The context of permanent overload offered by health institutions usually does the rest and the family is often alone and overwhelmed. The near future does not seem promising with the aging of the population, smaller or absent families and predominant paradigms of secular beliefs with little spiritual dimension. 



Is it necessary to rescue the spiritual dimension of health care? Controversy is served. It seems that we are moving towards a hypertechnological fairy-tale medicine, as Juan Gérvas says, capable of all kinds of prowess. Maybe we are building a giant with feet of mud. What good is it for man to win the world if he loses his soul? What good are all the advances if in the end we do not find serenity, meaning or hope in the face of terminal illness, decrepitude and death?




Retrato de Paul Kingsnorth



精神醫學


“我們正在經歷的危機,我們創造的自然世界的崩潰,以及我們在上個世紀所生活的文化,只不過是一場精神危機。我們是歷史上唯一的文明在廣義的意義上,我們沒有任何宗教信仰,沒有任何優於我們的概念。沒有任何東西可以跪下來,沒有什麼可以激發謙卑。既不是神,也不是女神,也不是神聖的本性。認識到這些術語我們認為它們是老式的,空洞的。超越宗教的進化是我們進步神話的一部分我不這麼認為,而且我很難意識到不相信更高的東西使我們成為驅逐艦。我們把自己置於世界的中心。我們已成為地球的癌症。我對這一切的結論,或者我不知道是否稱之為結論,相當一步,是這樣的:如果我們想要我們的文化 - 或者我們想稱之為 - 擁有未來,我們將不得不賦予大自然神聖的地位。我們將不得不退後一步,尋找一個萬物萬物的社會主義社會:海神,石頭,風等。我們將不得不退後一步,尋找一個萬物萬物的社會主義社會:海神,石頭,風等。如果我們無法認識到我們是一個重要網絡的一部分,只把事物視為資源,那麼我們就會迷失方向。 我們是動物,我們與3萬年前繪製洞穴壁畫的人完全相同。在生物學層面上,我們幾乎沒有改變。我們仍然是野生動物,尚未被馴化。我們不會放棄文明層面,但這很容易被撕裂。“ 保羅金斯諾斯


現代醫學是一門技術性很強的科學學科。這已經拋棄了它的歷史精神層面,並使其人文主義版本受到損害。衛生專業人員已成為該領域的技術人員和科學家以及醫學和其他學科。

經過許多世紀的歷史,我們現在可以說現代醫學是非精神的,具有這可能具有的所有優點。我問自己的問題是,我們是否會在此過程中失去一些重要的東西。

當伴隨著慢性疾病,嚴重疾病或生命的最後階段的過程時,我發現自己在患者無法挽救他們之前感到沮喪。那就是全部嗎?我們可以不做更多嗎?

要解釋衰老和死亡是生命的內在組成部分並不容易解釋,最後階段的藥物可以緩解症狀,但不會帶來寧靜或希望。

當家庭失去了對信仰,希望或精神願望的遺傳,並且對於許多人而言,它可以與牧師交談,除了認識到每天以最大可能的尊嚴生活的重要性之外,健康專業人員幾乎無法做到。在許多情況下,最有價值的事情就是在場,在家中探望病人及其家人,讓他們看到他們仍然得到照顧和考慮。根據患者的需要提供沉默或對話。並為他們盡可能減少痛苦的願望而休息。

這種方法對於受過嚴格耐受陽痿和非暴力行為的受過訓練的專業人員來說非常困難。習慣上提出的退卻行為是在“這不關我的事”或“它超出我的能力”的思想下進行的。衛生機構提供的永久性超負荷的背景通常是其他人和家庭經常獨自和不堪重負。不久的將來,人口老齡化,家庭規模較小或缺席以及世俗信仰的主導範式幾乎沒有精神層面的影響。


是否有必要拯救醫療保健的精神層面?提供爭議。正如JuanGérvas所說,我們似乎正在走向一種超技術的童話醫學,能夠提供各種實力。也許我們正在建造一個有泥腳的巨人。如果失去靈魂,人類贏得世界會有什麼好處呢?如果最終我們在面對絕症,衰老和死亡時沒有找到寧靜,意義或希望,那麼所有的進步有什麼用呢?


自動翻譯,對不起錯誤。

 

lunes, 22 de julio de 2019

Violencia de género Gender-based violence 基於性別的暴力




Tras leer la guía de Violencia de Género que acaban de publicar en el País Vasco y que mi amigo Maxi Gutierrez me ha compartido publico esta breve reflexión en forma de puntos breves.



1. Los profesionales de la salud solemos ser ciegos frente a problemas enormes que no son verbalizados en consulta.

2. La violencia, en todas sus formas, es uno de ellos.

3. Las mujeres por ser mujeres sufren más violencia.

4. La mejor forma de detectar violencia y otros problemas ocultos es sobre una relación de confianza labrada por el tiempo.

5. Hay que mantener la atención alta y tratar de ver lo que no se ve, que suele ser lo esencial como dijo el Principito.

6. Mejorar la sensibilidad ante la violencia contra las mujeres nos puede ayudar a hacer lo mismo con la violencia hacia los niños, ancianos, personas con adicciones y hacia los hombres.

7. Ante una sospecha o intuición lo correcto es plantear una pregunta facilitadora desde el respeto y el no juicio.

8. En todos los casos ofrecer ayuda y ser capaz de respetar la velocidad de la persona a la hora de aceptarla.

9. ¿Cómo nos van a contar estos problemas si no miramos a los ojos? Máximo cuidado con el uso del ordenador en la consulta y con nuestro nivel de comunicación y escucha.

10. Soy un ignorante frente a muchos problemas de mis pacientes. Por mi parte puedo tratar de formarme pero para aprender de verdad necesito la inestimable ayuda de la gente que los tiene. Preguntar ¿qué puedo hacer por usted en esta situación? suele dar buenas pistas.





La guía es un material para profesionales de la salud que servirá para mejorar la formación. Habrá que dar más pasos, tanto dentro como fuera del sistema sanitario. De momento me sirve de alegría que un grupo de compañeros y compañeras de Atención Primaria de Euskadi haya participado en esta iniciativa.




Existe también un documento abreviado para profesionales.




Gender-based violence



After reading the guide on Gender Violence that has just been published in the Basque Country and that my friend Maxi Gutierrez has shared with me, I publish this brief reflection in the form of brief points.



1. Health professionals are usually blind to enormous problems that are not verbalized in the clinic.



2. Violence, in all its forms, is one of them.



3. Women suffer more violence because they are women.



4. The best way to detect violence and other hidden problems is through a relationship of trust built up over time.



5. You have to keep your attention high and try to see what you can't see, which is usually what is essential, as the Little Prince said.



6. Improving sensitivity to violence against women can help us do the same with violence against children, the elderly, people with addictions and men.



7. When faced with a suspicion or intuition, the right thing to do is to ask a facilitating question based on respect and non-judgment.



8. In all cases offer help and be able to respect the speed of the person when accepting it.



9. How are they going to tell us about these problems if we don't look into their eyes? Maximum care with the use of the computer in the visit and with our level of communication and listening.



10. I am ignorant about many of my patients' problems. For my part I can try to train myself but to really learn I need the invaluable help of the people who have them. Asking what I can do for you in this situation usually gives good clues.



The guide is a material for health professionals that will serve to improve training. More steps will have to be taken, both inside and outside the health system. For the moment, I am delighted that a group of colleagues from Primary Care in the Basque Country have taken part in this initiative.




Summary version available.



(Traducción automática al chino, perdonen los errores)


基於性別的暴力



在閱讀剛剛在巴斯克地區發表的性別暴力指南以及我的朋友Maxi Gutierrez與我分享之後,我以簡短的觀點形式發表了這個簡短的反思。

https://www.osakidetza.euskadi.eus/contenidos/informacion/guia_violencia_genero/es_def/adjuntos/guia_vg_es.pdf


衛生專業人員通常對在臨床上沒有語言表達的巨大問題視而不見。



2.各種形式的暴力就是其中之一。



3.女性遭受更多暴力,因為她們是女性。



4.檢測暴力和其他隱藏問題的最佳方法是通過長期建立的信任關係。



你必須保持高度的注意力,並試著看看你看不到的東西,正如小王子所說的那樣,這通常是必不可少的。



6.提高對暴力侵害婦女行為的敏感性可以幫助我們對暴力侵害兒童,老年人,吸毒成癮者和男子的行為做同樣的事情。



7.當面對懷疑或直覺時,正確的做法是在尊重和不判斷的基礎上提出一個促進性問題。



8.在所有情況下都提供幫助,並且能夠在接受時尊重他人的速度。



9.如果我們不看他們的眼睛,他們怎麼會告訴我們這些問題呢?在訪問中使用計算機以及我們的溝通和傾聽程度,最大程度的關注。



我對許多病人的問題一無所知。就我而言,我可以嘗試訓練自己,但要真正了解我需要擁有它們的人的寶貴幫助。在這種情況下詢問我能為你做些什麼通常會提供很好的線索。




該指南是衛生專業人員的材料,將用於改善培訓。在衛生系統內外都必須採取更多步驟。目前,我很高興巴斯克地區初級保健的一組同事參與了這一倡議。

自動翻譯,請原諒我的錯誤.

miércoles, 10 de julio de 2019

Hacia una pedagogía del malestar Towards a pedagogy of malaise 邁向不適的教育學




"Sólo sufrimos porque pensamos que las cosas deberían ser de otra manera. En cuanto abandonamos esta pretensión, dejamos de sufrir". Pablo d'Ors


  • ¿Cómo enseñar a alguien a sufrir?
  • ¿Es posible aprender a manejar el propio malestar? ¿Llegar a ser excelente en el manejo?
  • ¿Cómo ayudar al que sufre a mirar a los ojos de su propio sufrimiento?

  • ¿Cómo hacer comprender al que se ahoga en la dificultad que por muy real que sea su sufrimiento este no puede comprometer por si mismo su vida?

Lo habitual cuando uno experimenta malestar es:

1. Huir

Si esto no funciona:

2. Atacar

Tanto hacia fuera como sobre todo a uno mismo. Darse caña uno mismo es una de nuestras actividades favoritas, no es fácil reconocerlo.


Nuestra cultura ha sofisticado la huida, entre otras cosas se considera una civilización del espectáculo y la distracción. Cada vez nos rodean más pantallas, aparatos y adminículos que nos ayudan en esta misión para permanecer permanentemente despistados.


Pero llega un punto en que nada consigue distraernos del malestar cuando este es lo suficientemente fuerte. Al finar caemos en sus garras y nos rallamos. Comenzamos una dinámica de centrifugado cognitivo y emocional de la que es muy difícil salir. Si han visto alguna vez algún roedor corriendo dentro de una rueda saben de lo que hablo.


La sociedad termina convirtiendo el malestar en una fuente de bienes de consumo. Ante la mínima incomodidad se nos ofrecen incontables productos y servicios. Pase por caja, consuma, compre, diviértase. Y cuando el centro comercial no es suficiente acuda a los servicios sanitarios que estarán encantados de atenderle. De esta forma las consultas de terapeutas alternativos, complementarios, suplementarios o reglamentarios están rebosantes, ya sean públicas o privadas, elitistas o de barrio.
Los profesionales sanitarios reciben una enorme carga de malestar sobre ellos para la que disponen de tiempos limitados. Es frecuente que la respuesta sea química o industrial. Tome usted esta pastilla o pase usted al siguiente especialista de la cadena. Muy pocas veces se llama malestar al malestar. Muy pocas veces se ayuda a quien lo siente a reconocer su responsabilidad en sobrellevarlo y acunarlo.

Tenemos en las manos la paradoja de ser una sociedad en constante busca de la felicidad, o lo que es lo mismo: en permanente huida de la infelicidad. Y hemos olvidado que ambas son la cara y la cruz de la existencia, no hay luz sin sombra ni sombra sin luz.

Los profesionales de la salud tenemos una asignatura pendiente para ayudar a la persona que sufre a reconocer lo que es malestar inherente a la vida y diferenciarlo de la enfermedad. También hemos de aprender a acompañarlo, orientarlo y aliviarlo y no solo a tratarlo. La respuesta fácil para nosotros es la pastilla, pero no siempre es la correcta.

Los ciudadanos en general tenemos otra asignatura pendiente, la de manejar mejor el malestar y la infelicidad personal cimentando un autocuidado basado en la aceptación, el autoconocimiento y la búsqueda de soluciones personales en lugar de seguir culpando a los demás del mismo y exigiendo al estado que nos quite de encima una infelicidad que no es su competencia.





Towards a pedagogy of malaise 



  • How to teach someone to suffer?
  • Is it possible to learn to handle one's own discomfort? To become excellent at handling it?
  • How can we help the suffering person to look into the eyes of his own suffering?




  • How can we make the one who drowns in the difficulty that no matter how real his suffering may be, he cannot compromise by itself his life?




The usual thing when one experiences discomfort is:



1. Fleeing



If this doesn't work:



2. Attack



Either to the outside and above all to oneself. Self-punishment is one of our favorite activities, it is not easy to recognize it.



Our culture has sophisticated flight, among other things is considered a civilization of spectacle and distraction. More and more screens, gadgets and tech surround us, helping us in this mission to remain permanently absent-minded.



But there comes a point when nothing manages to distract us from discomfort when it is strong enough. At last we fall into its claws and grate. We begin a dynamic of cognitive and emotional centrifugation from which it is very difficult to get out. If you have ever seen a rodent running inside a wheel you know what I'm talking about.



Society ends up turning discomfort into a source of consumer goods. With the least discomfort we are offered countless products and services. Check out, consume, buy, have fun. And when the shopping centre is not enough, go to the health services that will be delighted to attend you. In this way the consultations of alternative, complementary, supplementary or regulatory therapists are overflowing, whether public or private, elitist or popular.

Healthcare professionals are burdened with an enormous amount of discomfort for which they have limited time to manage. The answer is often chemical or industrial. Take this pill or go to the next specialist in the chain. Discomfort is rarely called by his name. Rarely we help to those who feel malaise to recognize their responsibility in bearing it and cradling it.



We have in our hands the paradox of being a society in constant search of happiness, or what is the same: in permanent flight from unhappiness. And we have forgotten that both are the face and the cross of existence, there is no light without shadow and no shadow without light.



We health professionals have a pending subject to help the suffering person to recognize what is inherent discomfort in life and differentiate it from disease. We must also learn to accompany it, guide it and alleviate it and not just treat it. The easy answer for us is the pill, but it is not always the right one.



We citizens in general have another unresolved issue, that of better handling personal discomfort and unhappiness by building self-care based on acceptance, self-knowledge and the search for personal solutions instead of continuing to blame others for it and demanding the state to remove from us an unhappiness that is not its competence.








邁向不適的教育學



如何教別人受苦?

是否有可能學會處理自己的不適?要善於處理它?

我們怎樣才能幫助受苦受難的人看到自己痛苦的眼睛呢?



我們怎樣才能讓那個淹沒在困境中的人無論他的痛苦多麼真實,他都不能自己妥協他的生活?


當一個人感到不適時,通常的事情是:



1. 逃跑



如果這不起作用:



2.攻擊



無論是對外還是對自己。自我懲罰是我們最喜歡的活動之一,不容易認識到它。



我們的文化有著複雜的飛行,其中包括被視為奇觀和分散的文明。越來越多的屏幕,小工具和技術環繞著我們,幫助我們在這一使命中永遠留下了心不在焉。


但有一點是,當它足夠強大時,沒有任何東西可以分散我們的注意力。最後我們陷入了它的爪子和篦子。我們開始了一種動態的認知和情感離心,很難擺脫它。如果你曾經看過一個在車輪內運行的囓齒動物你知道我在說什麼。


社會最終將不適變成消費品來源。隨著最不舒服,我們提供無數的產品和服務。退房,消費,購買,玩得開心。如果購物中心還不夠,請前往很高興為您服務的健康服務。通過這種方式,替代,補充,補充或監管治療師的諮詢範圍正在氾濫,無論是公共的還是私人的,精英的還是流行的。



醫療保健專業人員承受著巨大的不適,他們只有有限的時間來管理。答案通常是化學或工業。服用此藥或轉到鏈中的下一位專家。他的名字很少引起不適。我們很少幫助那些感到萎靡不振的人,讓他們認識到自己承擔責任並抱著它的責任。


我們手中有一個悖論:成為一個不斷尋求幸福的社會,或者是什麼是相同的:永遠逃離不幸。而且我們忘記了存在的面孔和十字架,沒有光沒有光,沒有光沒有光。


我們的衛生專業人員有一個待定的課題,幫助受苦受難的人識別生活中固有的不適並將其與疾病區分開來。我們還必須學會陪伴它,引導它並減輕它,而不僅僅是對待它。對我們來說,簡單的答案是避孕藥,但它並不總是正確的。


我們的公民一般還有另一個未解決的問題,那就是通過建立基於接受,自我認識和尋求個人解決方案的自我護理來更好地處理個人的不適和不快樂,而不是繼續責怪他人,並要求國家從我們不滿意,不是它的能力。


自動翻譯,請原諒我的錯誤。

lunes, 8 de julio de 2019

¿Merece la pena ser Influencer en salud? Is it worth being a health influencer? 是否值得成為健康影響者?











Estos días ha tenido lugar cierto debate en Twitter sobre la eterna cuestión de si es ético que una médica se meta a empresaria y comience a vender productos en paralelo a su labor asistencial. La polémica se abrió muy fácilmente al ser la interpelada una conocida influencer del sector, una pediatra conocida en los medios. El delito: vender chupetes.

No voy a detenerme ni un segundo más en el caso citado porque considero que no merece por mi parte mayor consideración habida cuenta de otros problemas de calado que sí la tienen a parte de que otras mentes, más claras de la mía, han analizado en extenso el tema.

Lo que sí me parece digno de reflexión es si a la sociedad le puede interesar que sus profesionales sanitarios tengan cierto rol divulgativo y presencia en redes sociales y medios de comunicación. La salud es un tema que preocupa a todos y es un hecho que la información sanitaria que se encuentra más fácilmente en Internet no es de mucha calidad fundamentalmente por los intereses privados que la producen. ¿Son más fiables los profesionales sanitarios que las marcas de productos, la industria farmacéutica y demás? Probablemente sí. Lo cierto es que la exposición pública no suele ser deseada por los mismos dado que no reporta beneficios y es fácil que produzca problemas (críticas, malentendidos, resbalones, Trolls...). Por otro lado si a alguna enfermera o galeno se le ocurre ponerse a vender algo no duden que desde el minuto uno se le echarán encima una buena turba de compañeros enfurecidos.

En este asunto hay grados como en todo. La industria farmacéutica sigue moviendo millones para promocionar sus productos y eso incluye influenciar los sanitarios. Considero que es mucho más grave vender, promocionar o alentar fármacos, vacunas o quimioterápicos que ofrezcan poco o nulo valor (la lista es larga) que chupetes. Pero bueno es tan solo una opinión.

¿Cómo puede recuperar un sanitario el esfuerzo de mantener un blog, una cuenta en redes sociales o un canal de vídeo? Económicamente es muy díficil. Las recompensas suelen ser el reconocimiento social, la visibiliación de contenidos, la participación en debates y alguna invitación a jornadas o eventos, poco más. A nivel monetario quizá lo más ético sea escribir libros, otros meten publicidad en sus contenidos o venden merchandaising. También se pueden ofrecer cursos o conferencias remuneradas. Lo cierto es que nada de esto suele producir beneficio destacable.

¿Se pude promocionar comida o bebida? ¿Se puede apoyar algún producto de parafarmacia? ¿Sillas de ruedas, gafas...? ¿Hasta qué punto se mancha las manos el profesional de la salud que vende algo?


El debate está servido. Y será bueno que se reflexione sobre el tema. La sociedad necesita que sus profesionales sanitarios les ayuden con la información, la formación y la divulgación y a priori sería lícito incentivarlo. El problema es que si las recompensas no están claras las cosas seguirán como están, con una potente industria farmacéutica haciendo de padrino tras las bambalinas y unos profesionales que no encuentran formas correctas para monetizar un esfuerzo divulgador que cuesta horas de trabajo mantener.








Is it worth being a health influencer?



These days there has been some debate on Twitter about the eternal question of whether it is ethical for a doctor to become a businesswoman and start selling products in parallel with her clinical work.  The controversy was  opened when a known influence of the sector, a pediatrician known in the media was hunted. The crime: selling pacifiers.



I am not going to waste a second in the case because I believe that it does not deserve greater consideration on my part given other deep-seated problems that we have apart from the fact that other minds, clearer than mine, have extensively analyzed the subject.



What I do find worthy of reflection is whether society can be interested in its health professionals having a certain informative role and presence in social networks and the media. Health is an issue that concerns everyone and it is a fact that the health information that is more easily found on the Internet is not of much quality, mainly due to the private interests that produce it. Are health professionals more reliable than product brands, the pharmaceutical industry and others? Probably yes. The truth is that public exposure is not usually desired by them since it does not bring benefits and it is easy to produce problems (criticisms, misunderstandings, slips, Trolls...). On the other hand, if a nurse or doctor comes up with something to sell, don't doubt that from the first minute he get a good mob of angry colleagues over him.



In this matter there are degrees as in everything. The pharmaceutical industry continues to move millions to promote its products and that includes influencing the sanitary. I think it is much more serious to sell, promote or encourage drugs, vaccines or chemotherapy that offer little or no value (the list is long) than pacifiers. But that's just an opinion.



How can a healthcare provider recover the effort of maintaining a blog, a social network account or a video channel? Economically it is very difficult. The rewards tend to be social recognition, the visibility of content, participation in debates and some invitation to conferences or events, little more. On a monetary level, perhaps the most ethical thing is to write books, others advertise their contents or sell merchandaising. It is also possible to offer paid courses or conferences. The truth is that none of this usually produces remarkable benefits.


Is it possible to promote food or drink? Is it possible to support a parapharmacy product? Wheelchairs, glasses...? To what extent does the health professional who sells something stain his hands?


The debate is on the table. And it will be good to reflect on the subject. Society needs its health professionals to help them with information, training and dissemination and a priori it would be licit to encourage it. The problem is that if the rewards are not clear, things will continue as they are, with a powerful pharmaceutical industry acting as a sponsor behind the scenes and professionals who do not find the right ways to monetize a dissemination effort that takes hours of work to maintain.





Fernando Fabiani es un ejemplo de divulgación de calidad en nuestro medio.




是否值得成為健康影響者?




這些天在Twitter上有一些爭論,關於一個永恆的問題,即醫生成為一名女商人是否合乎道德,並開始與她的臨床工作同時銷售產品。當媒體中一位知名的兒科醫生被獵殺時,該爭議就被打開了。犯罪:賣奶嘴。



我不會在案件中浪費一秒鐘,因為我相信我不應該考慮其他根深蒂固的問題,除了我比其他人更清楚地分析了這個問題的其他思想之外,我不應該更加考慮這個問題。 。


我認為值得思考的是社會是否對其在社交網絡和媒體中具有一定信息作用和存在的健康專業人士感興趣。健康是一個涉及每個人的問題,事實上,在互聯網上更容易找到的健康信息質量不高,主要是由於產生它的私人利益。健康專業人士比產品品牌,製藥行業和其他人更可靠嗎?可能是。事實上,他們通常不希望公眾曝光,因為它不會帶來好處而且容易產生問題(批評,誤解,滑倒,巨魔......)。另一方面,如果護士或醫生提出要賣的東西,不要懷疑從第一分鐘他就有一群憤怒的同事在他身上。


在這件事上,所有事物都有度。製藥行業繼續推動數百萬美元來推廣其產品,其中包括影響衛生。我認為出售,促銷或鼓勵藥物,疫苗或化療比奶嘴提供很少或沒有價值(清單很長)要嚴重得多。但這只是一種意見。


醫療保健提供商如何恢復維護博客,社交網絡帳戶或視頻頻道的工作?經濟上非常困難。獎勵往往是社會認可,內容的可見性,參與辯論和一些會議或活動的邀請,更多。在貨幣層面,也許最道德的事情是寫書,其他人宣傳他們的內容或出售商品。也可以提供付費課程或會議。事實是,這通常都不會帶來顯著的好處。


是否有可能推廣食物或飲料?是否有可能支持藥店產品?輪椅,眼鏡......?銷售東西的健康專業人員在多大程度上會弄髒他的手?


辯論擺在桌面上。反思這個問題會很好。社會需要其衛生專業人員幫助他們獲取信息,培訓和傳播,並且先驗地鼓勵它。問題在於,如果獎勵不明確,事情將繼續保持原樣,一個強大的製藥行業充當幕後的讚助商和專業人士,他們找不到正確的方法來通過需要花費數小時工作的傳播工作來貨幣化保持。


自動翻譯,請原諒我的錯誤。